Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea, en tan graciosa belleza. A Ti celestial princesa, Virgen Sagrada María, te ofrezco en este día, alma vida y corazón. Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía.
Amén.
Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea, en tan graciosa belleza. A Ti celestial princesa, Virgen Sagrada María, te ofrezco en este día, alma vida y corazón. Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía.
Amén.
Hola Sergio, muchas gracias por tu comentario. Sí, para un niño es fácil aprenderla.
Excelente! oración que rezo desde que me la enseñó mi abuela… me gusta mucho este ofrecimiento a la Virgen.
Hola. Efectivamente es una oración de hace bastante años, y sí, mucho de esto queda en nuestros abuelos y se pasa de generación en generación. Esta es mucho la intención del sitio, poder tener estas oraciones escritas y disponibles para difundir, después de todo, la fe se comparte.